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Foto del escritorYORSDAN RANKIN

Dictadura de Maduro consolida su fraude tras su victoria en Venezuela

Con el 80% de las actas escrutadas, el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, Elvis Amoroso, anunció en una conferencia de prensa nocturna que Nicolás Maduro ha sido declarado vencedor de las elecciones con el 51,2% de los votos.

Edmundo González, su principal rival, obtuvo el 44,2% de los sufragios.

Más de 20 millones de venezolanos fueron convocados a votar este domingo 28 de julio.


Sin embargo, de acuerdo al reporte del CNE, solo se registró un 59% de participación electoral, lo que indica que un significativo número de ciudadanos decidió no ejercer su derecho al voto.
La situación en Venezuela sigue siendo crítica, con una población que enfrenta escasez de alimentos, medicinas y servicios básicos, mientras la comunidad internacional continúa debatiendo la mejor manera de apoyar a los venezolanos en su lucha por recuperar la democracia y mejorar sus condiciones de vida.

Sin embargo, de acuerdo al reporte del CNE, solo se registró un 59% de participación electoral, lo que indica que un significativo número de ciudadanos decidió no ejercer su derecho al voto.

El resultado de estas elecciones ha generado diversas reacciones tanto a nivel nacional como internacional. Mientras los partidarios de Maduro celebran la victoria, los seguidores de González y otros sectores de la oposición han expresado su descontento y han solicitado una revisión exhaustiva del proceso electoral.

El presidente chileno Gabriel Boric fue una de las voces regionales más contundentes luego de que se conocieran los datos oficiales comunicados por el chavismo a través del CNE, que dieron como ganador de las elecciones presidenciales a Nicolás Maduro sobre el líder opositor Edmundo González.

Boric, junto con otros mandatarios de la región, ha manifestado su preocupación por la falta de transparencia y la manipulación de los procesos electorales en Venezuela.


“Puedo decir ante el pueblo de Venezuela y el mundo: soy Nicolás Maduro Moros, presidente reelecto de la República Bolivariana de Venezuela”, clamó ante cientos de seguidores en el palacio presidencial de Miraflores en Caracas.
En medio de acusaciones por violaciones a los derechos humanos y una crisis económica sin precedentes, Nicolás Maduro se ha sostenido en el poder por casi una década, a pesar de las presiones internacionales.

En este contexto, observadores internacionales y organizaciones de derechos humanos han manifestado su preocupación por la situación en Venezuela, pidiendo que se garantice la voluntad del pueblo y que se respeten los principios democráticos.




La jornada electoral estuvo marcada por un ambiente de tensión y expectativas, con un país dividido y enfrentando una profunda crisis económica y social.

A medida que se despejan las incógnitas sobre el proceso electoral, la atención ahora se centra en los próximos pasos y en cómo las autoridades manejarán los desafíos y las demandas de la población.


No ofreció más detalles sobre la naturaleza de esta agresión, pero enfatizó que el organismo electoral trabajó arduamente para asegurar la transparencia y la integridad del proceso.
El presidente del CNE, Amoroso, explicó que el retraso en la comunicación de los resultados se debió a la necesidad de “solventar una agresión” al proceso electoral.

El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, exigió un recuento “justo y transparente” de los votos de las elecciones presidenciales de Venezuela en las que Nicolás Maduro consiguió la reelección con un 51,2% de los sufragios, según el Consejo Nacional Electoral, afín al chavismo.

Blinken, junto con otros líderes internacionales, ha llamado a una revisión exhaustiva del proceso electoral para asegurar que la voluntad del pueblo venezolano sea verdaderamente respetada.


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