Ministerio de cultura en Cuba prohíbe la exhibición de tres películas cubanas en la sala de “El Ciervo Encantado”, en la capital habanera.
La pedagoga, directora y actriz Nelda Castillo denunció que, por la desaprobación del Ministerio de cultura, se cancelaron tres proyecciones en el ciervo encantado, que estaban programadas para los días sábado 29 y domingo 30 del presente mes.
Nelda también expresó que estaba en total desacuerdo con esta decisión, no solo ella sino también varios cineastas.
A través de Facebook la exponente de la escena cubana contemporánea mostró que estaba inconforme y consideró la postura del Ministerio de cultura como “un acto de censura sin explicaciones hacia artistas cuyas obras dignifican y conforman la cultura cubana”.
En esta ocasión las obras que fueron censuradas son el corto de ficción "El Encargado" de Ricardo Figueredo, y los documentales "Existen", de Fernando Fraguela y Yulier Rodríguez y "La Habana de Fito", de Juan Vilar.
A raíz de este hecho tan vergonzoso sean solidarizados con los artistas diversos colegas del género, tal es el caso de Yunior García Aguilera, quien reside en Madrid y manifestó su inconformidad.
Así como también lo hizo la académica Alina Bárbara López Hernández, el realizador cubano salvadoreño Jorge Dalton, quien subrayó que:
"En la isla de pensamiento de izquierda mundial no solo no hay gasolina, luz, ni futuro, también hay censura, destierros, infelicidad general, desidia, abuso policial impune a diario, presos políticos, fuga masiva de jóvenes y detenciones arbitrarias y a granel"
Comparando además esta censura como la de Fito Páez en Argentina durante la dictadura militar fascista de derecha, el chile de Pinochet en que apagaron la voz de Víctor Jara y desaparecieron y encarcelaron a siniestras.
Realizando una serie de comparaciones con otros tipos de Estados dictatoriales a nivel mundial, mencionando Albania, Rumanía, Hungría, la Checoslovaquia, la Alemania democrática, la Unión soviética o la Polonia socialista y muy parecido también a la Grecia de los militares fascistas, declarando además la similitud con el infierno fascista de Daniel Ortega en Nicaragua.
Pero planteamientos similares también fueron los de otros tantos artistas como el de por ejemplo el director de fotografía Raúl Prado, quien no solo participó en dos de estos tres proyectos censurados, sino que también denunció que otras obras han sido también parte de esta larga lista de trabajos que desaparecen.
Prado alegó "En esta ocasión dicen que, por el Ministerio de cultura, en realidad la orden siempre parte del departamento ideológico o de la seguridad del Estado, nadie más se atreva a dar órdenes".
Y así continúa el régimen totalitario haciendo que los artistas no se sientan conformes con sus decisiones.
Según los datos uno de los actos de censura más recientes protagonizados por el régimen fue el de la prohibición de la proyección en el festival del nuevo cine latinoamericano de la película Vicenta B, del también recientemente exiliado en España y joven cineasta cubano Carlos Díaz Lechuga.
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